Si eres amantes del vino tinto, este artículo les arrancará más que una sonrisa. Te invitamos a leernos y enterarte de todos los beneficios que éste ofrece.
Muchas cosas se han llegado a escuchar acerca del vino; su delicioso sabor, su aroma exquisito y sus múltiples beneficios, lo han brindado la enorme fama con el pasar de los años, incluso, muchos profesionales pertenecientes a la comunidad médica lo recomiendan sus pacientes.
Claro está, muchas personas llegan a ser dependientes de las bebidas alcohólicas y el vino no suele ser la excepción frente este problema; no obstante, con el paso del tiempo se ha revelado que sólo éste ofrece beneficios al organismo; siempre y cuando se consuma con responsabilidad y de forma moderada.
En conclusión, el vino es recomendado de forma controlada; tanto así, que, tan sólo una copa al día debe ingerirse para obtener de él las cosas positivas de las cuales se harán mención más adelante dentro del artículo.
El vino posee diversas presentaciones y variedades; a pesar de ello, el día de hoy les hablaremos sólo de uno, el cual se considera como el más saludable de todos, el vino tinto.
Éste tipo de bebida es procedente de las uvas, en específico y en su mayoría por mostos de uvas tintas; reconocidas por ser propicias para este delicioso y saludable vino.
Aparte de dicho ingrediente, el tiempo y otro tipo de factores inciden de manera positiva en su elaboración; cabe recordar que, a mayor añejamiento, más exquisito y saludable se torna.
¿Sólo el vino tinto?
Se ha nombrado ya, que el vino posee diversas variedades en cuanto a sabor, aroma y añejamiento, cada una tiene características diferentes; no obstante, el más recomendado para beneficiar al ser humano es el tinto.
Muchos se preguntan por qué éste y no otros; en primer lugar la sugerencia gira en torno a éste por los enormes aportes realizados al sistema circulatorio y al corazón; tales serán mencionados más adelante dentro del artículo.
En segundo lugar, por la naturaleza del mismo; siendo proveniente de las uvas, recolectándose de forma manual y fabricándose, casi que en casa; esta bebida es una de las más finas, elegantes y saludables de su especie. Por lo tanto los invitamos a consumirlo con moderación y a seguir leyendo para conocer un poco más.
Beneficios ofrecidos por el vino tinto
Con base en todo lo mencionado de manera previa, se añade que, beber una copa del vino al día, puede llegar a brindar los siguientes beneficios. Acompáñennos a conocerlos.
1. Previene el cáncer
Los flavonoides y el resveratrol son unos de los principales componentes del vino, a éstos se les debe muchos de los beneficios a mencionar a continuación.
Éste es el caso de la prevención del cáncer, especialmente el de regiones como los pulmones, las mamas o senos y la próstata; consumir vino a diario reduce las probabilidades de padecer cualquier tipo de cáncer en las regiones del cuerpo ya mencionadas.
2. Contribuye a la digestión
La recomendación acerca del vino gira en torno a consumir una copa durante el día, pero no necesariamente sola; ésta puede acompañarse de otro tipo de alimentos, incluso, dicha costumbre puede traer consigo cosas positivas para el organismo.
Un ejemplo claro de ello se presenta cuando se ingiere un trozo de carne, utilizando como pasante el vino tinto; muchos lo ven como algo presuntuoso, pero, en realidad es beneficioso.
Con base en dicho ejemplo, los componentes relativos al vino tinto favorecen su digestión, así como la asimilación y procesamiento de las proteínas presentes en la carne.
3. Ayuda al sistema circulatorio
Uno de los sistemas más importantes del cuerpo humano es el circulatorio; éste se encuentra compuesto por el corazón (válvula principal encargada de impulsar la sangre por cada rincón del organismo), las arterias, las venas y por supuesto la sangre.
El primer beneficiado con el consumo de vino tinto es la sangre; su ingesta favorece al colesterol considerado bueno (HDL), en ese orden de ideas las formaciones de coágulos son menos improbables, contribuyen el flujo normal de la misma.
Además, las probabilidades de padecer infartos o paros cardiacos también se ven disminuidas; por ello, esta bebida ayuda al corazón de manera indirecta.
Por otra parte, según la comunidad médica, el vino tinto es un antioxidante muy favorable; por ello, puede prevenir enfermedades como la aterosclerosis o algunas coronarias.
4. Favorece la piel
Basándose en los beneficios aportados a la circulación y al corazón como tal, el consumo moderado de vino tinto, favorece de sobremanera la piel.
Los tejidos cutáneos suelen ser los más afectados ante diversas problemáticas internas del organismo, éste ayuda a manifestar los síntomas por medio de manchas, granos, inflamación y otro tipo de cosas similares.
Cuando la circulación sanguínea se encuentra en buenas condiciones, todos estos indicadores tienden a desaparecer; enfermedades como las hemorroides y las venas varices se ven contrarrestadas de lleno.
5. Cerebro sano
Nuevamente, haciendo énfasis en la circulación de la sangre por el organismo; una de las zonas más beneficiadas es la del cerebro.
Cuando se bebe vino tinto una vez al día, aquellas arterias que irrigan el cráneo y el sistema nervioso central, contienen mayores cantidades sangre oxigenada, favoreciendo de lleno al órgano más importante éste, el cerebro.
Por consiguiente, los daños cerebrales y enfermedades como el Alzheimer y la Huntington se previenen con esta gloriosa bebida.
6. Contrarresta los efectos del cigarrillo
Aunque se lea curioso, los componentes presente en el vino tinto son capaces de contrarrestar los efectos nocivos presentes en el tabaco, específicamente en el cigarrillo.
Una vez más, estos beneficios se presentan gracias al infinito favor imprimido en las arterias y venas relativas al sistema circulatorio. Cuando se ingiere esta bebida efectos como la vasodilatación son regulados de buena manera. Además, de forma paulatina, la fricción entre los vasos linfáticos se ve mitigada.
7. Disminuye la aparición de cálculos renales
Las piedras o los cálculos formados en los riñones suelen hacerse a partir de pequeños trozos compuestos de proteína, los cuales quedan ‘atorados’ luego de la absorción y separación de nutrientes.
El vino tinto contribuyen a la asimilación proteica en el organismo, por lo tanto, las probabilidades de sufrir este problema se ven disminuidas ampliamente; siempre y cuando, el consumo de dicha bebida sea moderado y controlado.