El suero es un subproducto de la producción de queso. Es rico en ácido láctico y enzimas, proteínas de alta calidad, vitaminas B6, B2, B12, K, C, minerales como calcio, potasio, magnesio y fósforo, aminoácidos y es bajo en calorías.
La gente ha utilizado durante mucho tiempo el suero de leche para estimular el apetito y la digestión, y la ciencia moderna ha descubierto que previene la hipertensión, los accidentes cerebrovasculares y los ataques cardíacos, regula el colesterol, aumenta la masa muscular, previene la osteoporosis, fortalece la inmunidad, reduce el estrés y proporciona suficiente energía.
El suero en polvo se obtiene mediante el procesamiento industrial de la leche y no se parece en nada al suero casero.
Haz tu propio suero casero
Cocine un litro de leche cruda y agregue un poco de jugo de limón mientras aún esté caliente. Exprime un limón entero.
Remueve bien y déjalo reposar hasta que veas un líquido verdoso traslúcido que se separa de la cuajada. Ese es tu suero. Cuela y vierte en una botella de vidrio. Guárdelo en el frigorífico.
Este proceso le brinda dos productos increíbles: suero y un delicioso requesón casero.
Beba 0,5-1 litro de suero todos los días.
Revuelva una cucharada de suero en polvo en un vaso de agua y bébalo al menos tres veces al día.
¡Consulte a su médico antes de usar remedios caseros!
